Toda gran historia tiene un final. Las hay que terminan por todo lo alto, otras que lo hacen sin pena ni gloria y algunas que simplemente se acaban. El martes 29 de noviembre de 2022, en Doha, se vivió el cierre de una irrepetible, inolvidable, la de Gareth Frank Bale.
La leyenda del ‘Expreso de Cardiff’ se gestó con un comienzo brillante y un palmarés de ensueño. Salió de su Gales natal para destacar en la Premier League e hizo historia con el Real Madrid. Tal vez le faltó constancia para pelearle el Balón de Oro a Cristiano y Messi.
Su carácter introvertido, el gusto por el golf y las lesiones harán que algunos le recuerden con algo de desagrado. Sin embargo, nada podrá empañar todo lo que ha conseguido. Fue un talento generacional de esos que marcan una época.
Da la sensación de que toda su carrera ha sido un viaje marcado por la alta velocidad. El vértigo marcó sus buenos momentos. Muchos, pero fugaces comparados con los períodos que pasó parado por algún problema físico.
Aún así, siempre le quedó algo de salud para defender el escudo de los ‘Dragones Rojos’. Cada vez que vistió esa camiseta se vio a un Bale diferente al que se presentaba con su club. Un Gareth feliz. Así consiguió convertirse en el mejor jugador de la historia de su país, llevarlo a las semifinales de una Eurocopa y clasificarlo para un Mundial después de 64 años de ausencia.
Todo ello con solo 33 años. En su línea, muy rápido. Tal vez, ir sin freno le llevó a perder pronto el gusto por las bondades de ser futbolista profesional. Se bajó rápido de la cima y el final se precipitó antes de lo que cabía esperar.
El brillo dejó paso a la decadencia y un final prematuro en el fútbol de hoy en día. Al principio hablábamos de los desenlaces de las grandes historias. El del Expreso de Cardiff fue triste, muy parecido a este Gales - Inglaterra.
Gareth Bale mantuvo el paso firme más o menos hasta la mitad de su carrera. A partir de ahí todo fue para abajo. Problemas en el Madrid, en su regreso al Tottenham y un último partido con su selección en el que fue sustituido en el descanso cuando más le necesitaban.
Siempre fue un hombre de costumbres. En Catar 2022 realizó exactamente las mismas paradas que hemos relatado anteriormente. Deslumbró en su debut con un desempeño físico encomiable y un gol de penalti. Sin embargo, con el paso de los partidos confirmó que se trataba más de una actitud voluntariosa que de capacidad para encabezar una plantilla en la Copa del Mundo.
Ya fuese por más problemas físicos, por falta de ganas o debido a una decisión técnica, dejó huérfanos a sus compañeros en la segunda mitad del derbi británico. Sin un líder moral sobre el césped los goles llovieron sin parar en la portería de los ‘Dragones Rojos’, mientras el ‘Expreso de Cardiff’ se alejaba para no retornar, hasta el definitivo 0-3.
El final de la historia del Gareth Bale futbolista profesional parece que toca a su fin. Bajó el telón en su estilo, dejando mal sabor de boca a muchos. Sin embargo, eso nunca nos hará olvidar un viaje sensacional. Fugaz, pero inolvidable.
Jugador Flashscore del partido: Marcus Rashford
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