Para poner en contexto la petición de la entidad gaditana, durante el encuentro Cádiz-Elche de la jornada 17 el colegiado, Del Cerro Grande, dio por válido, previa consulta con el VAR, un tanto del cuadro ilicitano en el minuto 81. Desde el Comité Técnico de Árbitros reconocieron posteriormente que se trazó mal la línea por un error humano y que el tanto no debió subir al marcador.
Pero el gol fue dado por válido a pesar de la protestas y el encuentro finalizó con empate a 1, por lo que los andaluces consideran que perdieron dos puntos por un grave error arbitral.
En consecuencia, impugnaron el partido ante la RFEF, pero lós organos disciplinarios federativos se declararon incompetentes para decidir sobre ese asunto. De ahí que el Cádiz haya seguido adelante ante el TAD en su solicitud de adopción de medidas cautelares "consistentes en la suspensión temporal de la competición de Primera División (“LaLiga Santander”), hasta la efectiva resolución del Expediente por parte de los órganos competentes".
Lo que pretende finalmente el club amarillo es que se decida la "repetición parcial del citado Partido, con retroacción al momento anterior a producirse la negligente actuación del equipo arbitral, que dimanó en un error material manifiesto y grave, del que se derivan perjuicios potencialmente irreparables para el Cádiz CF".
Antecedentes similares
En el escrito que ha presentado el Cádiz ante el TAD, recuerda que ya hay antecedentes de repeticiones de partidos por groseros errores arbitrales en otras disciplinas deportivas e incluso por parte de la RFEF y de otros organismos futbolísticos. "En los casos de los partidos oficiales que enfrentaron a las Selecciones Nacionales de Uzbekistán-Baréin y Noruega-Inglaterra, en los que FIFA y UEFA, respectivamente, acordaron la repetición parcial de sendos encuentros, ello a los efectos de evitar los daños y perjuicios que las decisiones arbitrales erróneamente adoptadas causarían a las selecciones implicadas".
Desde el Cádiz aseguran que la paralización de LaLiga resulta "absolutamente necesaria para salvaguardar la integridad de la competición y garantizar la equidad e igualdad de los Clubes participantes en la misma, evitando una adulteración indeseada de dicha competición, fruto de un error técnico arbitral, manifiesto, grave y negligente, que en este momento es aún reparable y reversible".