Qué duda cabe de que no llegaba el Barça en un buen momento sino más bien en uno de los peores de los últimos años tras quedar prácticamente eliminado de la Europa League y perder el liderato de LaLiga Santander al caer en el Bernabéu el pasado domingo. Tampoco es que el Villarreal estuviera mucho mejor, al menos en el campeonato doméstico, donde solo llevaban una victoria en sus últimos cinco partidos.

Pero los culés volvieron a demostrar su mejor versión ante uno de sus rivales favoritos: los equipos entrenados por Unai Emery. Con el de este jueves, ya son 30 los partidos en los que el vasco se ha enfrentado al Barça y el balance no puede ser peor: 21 derrotas, seis empates y solo tres victorias. 

Emery apenas hizo cambios, pero Xavi sí optó por las rotaciones para darle un aire distinto a los suyos y hubo hasta cinco cambios respecto al once titular del Clásico: Jordi Alba por Balde, Marcos Alonso por Eric García, Gavi por Busquets, Ferran Torres por Raphinha y Ansu Fati, tras su gran partido ante el Madrid, por Dembélé.

Y le salió bien la apuesta al catalán porque el Barça fue un ciclón en la primera parte, arrollando al Villarreal desde el primer minuto en el que Fati (19) ya avisó de su gran estado de forma.

Los castellonenses, encerrados atrás, tan solo inquietaron a Ter Stegen en una ocasión a la contra, pero un tiro de Danjuma se fue al lateral de la portería.

Tormenta culé del minuto 31 al 38

Todo lo demás fue dominio azulgrana, que tardó media hora en abrir la lata de la de, hasta este partido, defensa menos goleada de LaLiga. Y tuvo que ser el de siempre. Robert Lewandowski aprovechó un pase de Alba para, con un simple control dentro del área, regatear a Pau Torres, a Albiol y hasta a Rulli para marcar a placer. 

Los delanteros como el polaco huelen la sangre del enemigo y se alimentan de ella, y tan solo tres minutos después cambió de registro para meter otro golazo. En esta ocasión, recibió un balón de Gavi en el pico del área, recortó y con tranquilidad disparó con rosca fuera del alcance del portero visitante.

Por si acaso le parecía poco al público del Spotify Camp Nou, Ansu Fati se sumó a la fiesta para noquear definitivamente a los de Emery. Al contrario de lo que sucediera en el Clásico, esta vez fue Ferran Torres quien hizo una gran jugada por la banda y le cedió el esférico al joven extremo español, que primero se encontró con el poste pero capturó el rebote para sentenciar de tacón. 

Sobró la segunda mitad

Por los mismos derroteros siguió la segunda parte, con los pupilos de Xavi controlando el partido y teniendo la posesión, pero el choque ya estaba visto para sentencia y lo sabían ambos conjuntos, por lo que dieron entrada a sus suplentes de cara a la siguiente jornada. Bellerín volvió tras su lesión e incluso, para asombro de muchos, jugó unos minutos Piqué, que recibió pitos por parte de la hinchada local.

Todavía hubo alguna ocasión para que los aficionados cantaran más goles, pero ni Fati, Raphinha o Ferran para los culés, ni Baena o Morales para el submarino amarillo movieron el 3-0 definitivo.

El Barcelona sigue segundo a tres puntos del Real Madrid y el domingo se las verá en casa contra el Athletic en la vuelta del extrenador azulgrana Ernesto Valverde al Camp Nou. Por su parte, el Villarreal es noveno a tres puntos de posiciones europeas y recibirán al Almería en la undécima jornada del campeonato.

Jugador Flashscore del partido: Lewandowski.

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