En Aston Martin están pasando un 2025 complicado, pero la situación se suaviza pensando que el año que viene Fernando Alonso (43) y Lance Stroll (26) pilotarán un coche completamente diseñado y supervisado por Adrian Newey (66), uno de los ingenieros más condecorados de la historia de la Fórmula 1.
Precisamente el veterano cerebro británico ha sido el encargado de transmitir optimismo de cara a lo que está por venir: "Las nuevas normas serán un desafío, pues es la primera vez que cambiará el chasis y la unidad de potencia al mismo tiempo", dijo.
"Encuentro estimulantes esos cambios. Es una oportunidad para nuevas ideas. No habrá nada espectacular porque para todos es lo mismo, pero es una gran motivación", expresó, acerca de la normativa nueva que entrará en 2026 al Gran Circo.
Newey, con su particular humor, reivindicó su vigencia, pese a sus métodos menos modernos: "Soy el último dinosaurio de la industria, todavía utilizo mesa de trabajo", bromeó. "Todos los equipos querrán implantar los cambios de la mejor forma posible", añadió.