El brasileño lleva en prisión desde principios de enero de este 2023 y todos sus intentos para salir en libertad condicional, una y otra vez han chocado con la misma negativa por el riesgo de que se pueda fugar del país. 

En esta última petición, presentada el 7 de noviembre, la respuesta ha sido la misma. Esto es, que la fuga podría ser posible gracias a su potencial económico, y más aún cuando la Fiscalía ya ha solicitado formalmente nueve años de cárcel de cara al juicio, que aún no tiene fecha de celebración. 

La defensa de Dani Alves ha insistido en que sus hijos viven en España y que ya ha depositado los 150.000 euros que la Fiscalía pide en concepto de reparación del daño. Algo que, para la Audiencia de Barcelona, no cambia nada, pues ya adujo que la llegada de sus hijos a Barcelona pareció algo premeditado precisamente para parecer que no quería huir del país. 

En cuanto al dinero, será en el juicio donde se valore si con ese dinero se repara realmente el daño que se hubiera podido causar a la víctima. 

De este modo, el exfutbolista deberá permanecer encarcelado sin posibilidad de fianza a la espera de la celebración del juicio.