Para su equipo, al que pertenece Juanpe López, más que mirar por la general, buscarán victorias de etapa al tiempo que ayudan a sus jóvenes promesas a conocer por dentro lo que es el Tour de Francia. 

"Tenemos tres opciones, más para las etapas, y a Ciccone para luchar por el maillot de la montaña, sin volverse muy loco por la general aunque la mire de reojo. A Mattias Skjelmose no le queremos meter presión, le tenemos mucha confianza, pero tiene que conocer el Tour", ha confesado Irizar. 

Es consciente, no sólo él sino el resto del pelotón, que la victoria final está en las piernas de Pogacar y Vingegaard, sin outsiders de por medio. "Pinta así, el Tour es largo, habrá que ver cómo llegan, a ver si alguno tiene un día malo, pero parece a priori que ellos dos son los que optan a la victoria y luego un ramillete para el tercer puesto". 

Especial para el técnico vasco será esta segunda etapa, que pasará por poblaciones como Mondragón, donde vive, u Oñate, donde tiene a su familia más cercana.