Argentina había anunciado una gira por China del 18 al 26 de marzo con encuentros contra Nigeria en Hangzhou, en el este, y frente a Costa de Marfil en Pekín, en la última ventana de preparación antes de la Copa América de Estados Unidos.
Pero el ambiente se enrareció alrededor del capitán argentino después de no participar por lesión en un amistoso el pasado domingo por el que los aficionados llegaron a pagar más de 460 euros.
El viernes por la noche, la Oficina de Deportes de Hangzhou anunció en un comunicado la cancelación del duelo entre la vigente campeona del mundo y la finalista de la Copa Africana de Naciones.
"Considerando los motivos que todo el mundo conoce, según las autoridades competentes, no se reúnen las condiciones para que el evento tenga lugar y se ha decidido anularlo", afirmaron.
Apenas horas después, el sábado por la mañana, la Asociación de Fútbol de Pekín señaló que la capital "no prevé, por ahora, organizar el partido en el que debía participar Lionel Messi".
El astro y el copropietario del Inter Miami, David Beckham, salieron abucheados y silbados del estadio, adonde habían acudido muchos aficionados de China continental.
El '10' apenas interactuó con el público, que había llenado el estadio con camisetas de su actual equipo y de su selección, e incluso evitó saludar a las autoridades al fin del encuentro.
El enfado entre la afición aumentó tres días después, cuando vieron que un sonriente Messi jugaba 30 minutos de otro amistoso en Japón.
El influyente diario nacionalista chino Global Times cuestionó en un editorial "la integridad" del futbolista y le reclamó "una explicación razonable" sobre lo ocurrido.
Presionada por las autoridades y la opinión pública, la revista Tatler Asia, organizador del partido en Hong Kong, prometió un reembolso del 50% del precio de las entradas.
China, un mercado estratégico
La probable cancelación de la gira supone un quebradero de cabeza deportivo y económico para la Asociación del Fútbol Argentino, que considera al país asiático como un mercado estratégico.
En junio de 2023, los flamantes campeones del mundo disputaron ya un amistoso en Pekín en una visita que permitió cerrar jugosos contratos con empresas locales.
La AFA cuenta con numerosos acuerdos de patrocinio con empresas chinas, como la cadena de cafeterías Cotti Coffee, la principal empresa láctea del país Yili o la alimentaria Panpan Food, entre otras.
"Somos muy conscientes de la importancia, la singularidad y el enorme potencial de crecimiento de AFA en el mercado chino", decía en enero Leandro Petersen, gerente comercial y de marketing de AFA, en un comunicado.
En lo deportivo, esta gira era la última ventana internacional para el conjunto de Lionel Scaloni de cara a preparar la disputa de la Copa América, en la que defienden título.
En la red social china Weibo, la mayoría de internautas parecían respaldar la decisión respecto a Leo, hasta ahora extremadamente popular en el país.
"Si no respeta a los aficionados chinos, no podemos dejar que se lleve un céntimo de los bolsillos chinos", dijo un internauta.
"Le habíamos dado nuestro amor y nos trata así. Se merece este revés", comentó otro.