Tras todos los problemas de salud que le han alejado en los últimos meses de ese lugar en la banda donde ha hecho historia en la NBA, incluido el último susto hace una semana cuando estaba cenando en un restaurante, el mítico Pop ha dicho adiós definitivamente a ese rol de entrenador en la escuadra texana.
La buena noticia para sus seguidores y para los de la franquicia es que Popovich seguirá ejerciendo un papel importante como presidente de operaciones.
Han sido cinco los anillos que ha conseguido el veterano técnico, miembro del Salón de la Fama, que tiene en su haber el récord de más victorias en la NBA con 1.422, y que ha dirigido a grandísimos y legendarios jugadores como David Robinson, Tim Duncan, Tony Parker o, en los últimos tiempos, a Victor Wembanyama. Sin olvidar, por supuesto, al mejor español de todos los tiempos, Pau Gasol.
"Mientras mi amor y pasión por el baloncesto continúan, he decidido que es la hora de dar un paso al lado como entrenador principal. Estoy agradecido de por vida por todos los maravillosos jugadores, entrenadores, cuerpo técnico y seguidores que me permitieron servirles como entrenador de los Spurs, y estoy emocionado por la oportunidad de continuar ayudando a la organización, a la comunidad y a la ciudad que tanto significan para mí", ha declarado Popovich.
Trayectoria
Popovich se unió a los de San Antonio como asistente de Larry Brown en 1988 y ha pasado 37 temporadas en la NBA, de las que 35 estuvo en los Spurs. Sólo entre 1992 y 1994 abandonó el equipo para marcharse al cuerpo técnico de Don Nelson en los Warriors. Desde entonces, un camino extraordinario que le llevó a construir varios de los mejores equipos de la liga norteamericana, así como a moldear a jugadores que dejaron de ser estrellas para convertirse en leyendas como él.
Hace seis meses sufrió un derrame cerebral que le obligó a ceder el mando del equipo de forma interina a su asistente Mitch Johnson. Y ahora ha sido él quien ha decidido dejar ese día a día tan exigente y continuar ligado a los Spurs desde un despacho.