Centro de estadísticas del Hiopos Lleida-Real Madrid
Salió con mucha fuerza el cuadro blanco, queriendo resolver a las primeras de cambio. Un 11-26 fue su primer aviso gracias a sus cinco triples -55 % de acierto- y a los centímetros de Tavares y Bruno Fernando, pero en la recta final del primer cuarto se rehicieron los catalanes para enfado de Chus Mateo, dejando la ventaja en 21-28.
La intimidación y el buen hacer de Hamilton en las dos zonas ayudó al crecimiento del Lleida, que desarboló la defensa blanca para tomar el mando del marcador por primera vez (33-32, min. 16). Lo que antes anotaba el líder con facilidad, ahora lo fallaba. Tuvo que volver a su quinteto inicial, con Campazzo y Hezonja muy enchufados, para dejarle las cosas claras a su rival y alcanzar el descanso nueve arriba (37-46).
De regreso al parqué, el hueco volvió a superar la decena en un par de ocasiones. El Lleida no se dejó intimidar y a base de ramalazos de furia y un 5/5 en triples, fue haciendo la goma para impedir que el choque se rompiera definitivamente. En ese intento de remontada se quedó Oriola (10 puntos) en el camino, eliminado por cinco faltas, la última una técnica. El público del Barris Nord se enfadó y empujó más a los suyos ante lo que consideraban una injusticia. Y de nuevo la distancia no sólo se redujo a la nada sino que los locales llegaron a disfrutar de una efímera ventaja. Al último cuarto se llegó 65-66.
Y ahí el Real Madrid ya puso fin definitivamente a la rebelión lleidatà con un 2-13 imposible de revertir para los pupilos de Gerard Encuentra. Y eso que Van der Vuurst insistió en que aún no había acabado. Pero lo máximo que pudieron hacer él y sus compañeros fue ponerse a siete a dos minutos del final. Hezonja, que se mantuvo en la cancha casi 36 minutos, puso la puntilla definitiva para sumar la victoria 16 en la acb, la octava consecutiva en la liga española
Los MVP
El alero croata fue el mejor del partido con 22 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias para 32 de valoración. Llull, con 16 puntos y 8 asistencias, fue clave también para el Madrid. En el Lleida, cinco jugadores llegaron a las dobles figuras en anotación.