Con pasaporte estadounidense, nunca se ganó el sitio en la NBA y pronto tuvo que emigrar a Europa, al Paris Basketball, en concreto, en 2018. 

Allí se convirtió en jugador trascendental y fue clave para conseguir el ascenso a la máxima categoría de Francia y para jugar, posteriormente la Eurocup, donde promedió 6.4 puntos, 3.1 rebotes y 7 de valoración.

Esta última campaña la jugó en Alemania, en el Basketball Löwen Braunschweig, con mejores promedios: 13.4 puntos, 6 rebotes y 16 de valoración.

Se trata de "un jugador físico, con un gran dominio en el rebote y con capacidad de abrir el campo gracias a su porcentaje desde la línea de tres", ha destacado su nuevo equipo.

Sleva nunca ha jugado en la NBA, aunque probó en la Liga de verano del año pasado con los Warriors, pero sin ganarse un sitio. 

Ha firmado un año con el UCAM Murcia. Será su debut en la acb.