"Fue una semana casi perfecta, doy diez sobre diez al equipo, que ha hecho un supertrabajo", declaró Pogacar durante una videoconferencia.

"Estoy contento de tener una buena ventaja (en la general). En la perspectiva del Tour de Francia, eso puede permitirme adoptar una estrategia más defensiva. Voy a utilizar lo máximo posible al equipo para alcanzar la línea de meta" en Roma el 26 de mayo con la 'maglia rosa', añadió.

Con nueve de las 21 etapas disputadas, Pogacar, vencedor de la 2ª, 7ª y 8ª, cuenta ya con más de dos minutos de ventaja sobre su primer perseguidor, el colombiano Daniel Martínez (2º a 2 minutos y 40 segundos), con el galés Geraint Thomas 3º a 2 minutos 58 segundos.

"Es algo bueno tener esta ventaja, pero nos preparamos para una segunda semana de ataques de nuestros competidores, en particular el equipo Ineos con (Thymen) Arensman (9º en la general) y Thomas", vaticinó.

Según el esloveno, que aspira a un doblete Giro de Italia-Tour de Francia el mismo año -gesta que nadie ha realizado desde Marco Pantani en 1998-, la 10ª etapa, el martes con salida en Pompeya, y sobre todo la 15ª, con llegada en Livigno, pueden marcar diferencias durante la segunda semana.

Pogacar, que participa por primera vez en el Giro de Italia, se mostró encantado con su experiencia en las carreteras italianas: "Hay diferencias entre las tres Grandes Vueltas, cada uno tiene su historia, pero yo tengo debilidad por el Giro. Está bastante bien organizado, tenemos suerte con el tiempo, las etapas no son demasiado largas y es menos estresante que el Tour de Francia", explicó el dos veces ganador del Tour.

También consideró que de sus tres victorias de etapa en este Giro, la "más bella" fue la de la 7ª etapa, una contrarreloj de 40,6 kilómetros en la que superó al gran especialista italiano Filippo Ganna.